Por eso desde Orsal pensamos que cualquier ocasión es buena para renovar la decoración de tu casa con las últimas tendencias de verano, así que si te quedas en casa, relájate y deja que entre el sol.
A continuación te trasladamos algunas claves para realizar ese cambio refrescante que da la bienvenida a la decoración de verano, llena de luz y color y que proporciona vida a nuestras casas de una manera alegre con un aire fresco.
Uso de colores claros
A la hora de llevar a cabo la decoración de verano de tu casa, la presencia de colores claros como debería resultar casi indispensable. Por un lado proporcionan una sensación visualmente relajada, aireada y sumamente amplia y limpia. Por otro lado trasmiten una sensación de mayor amplitud para todos.
Tonalidades en colores crema o bien el empleo del blanco son los principales protagonistas en la paleta de color empleada para cualquier tipo de decoración de verano, eso sí, sin olvidarnos de aportar originalidad en ciertos ambientes con el uso de colores mas vivos para crear una composición especial.
Con el uso de colores vibrantes y llamativos lograrás captar la atención de cada rincón de tu casa, empleando pocos elementos decorativos, con lo que seguirás manteniendo una estancia despejada y de aspecto fresco.
Menos es más
Y es que, poco a poco, nos estamos dando cuenta de que todo aquello que no cumple una función determinada en nuestras vidas es bueno prescindir de él. Lo mismo ocurre con la decoración de verano, cuando aligeramos el espacio en nuestra vivienda, conseguimos habitaciones más aireadas, visualmente limpias y ligeras, que fomentan la creación de una atmósfera mucho más desahogada y dotada de frescura.
Al igual que con la decoración, el mobiliario debería ser mucho más ligero y sencillo, sin tejidos pesados y colores oscuros y por supuesto eliminando todos los ornamentos y elementos innecesarios que realmente no aportan nada mas que polvo y suciedades.
Naturalmente curvo
En el 2022 una de las tendencia en decoración de verano más destacadas es la naturalidad que reflejan los materiales, texturas y superficies. Piezas de madera, tejidos de lino y algodón, fibras vegetales, cerámica, etc junto con los tonos neutros y la gama de verdes, azules y tierras lideran la decoración. Al igual que esa naturalidad se refleja con los muebles con curvas y diseños orgánicos que van desde lámparas y todo tipo de complementos de líneas sinuosas hasta sofás y sillones con respaldos envolventes. Ten en cuenta que las fibras naturales, pantallas de mimbre, yute, enea, bambú, ratán o cáñamo trenzado a mano son ideales para aportar frescura a la decoración. Además de ser naturales, las fibras son sostenibles, transmiten calma y bienestar, y son fáciles de combinar con otros elementos de la decoración que nunca pasan de moda.
Un verano lleno de flores
De todos los tamaños, grandes, pequeñas, estampadas, bordadas… Las flores se convierten en uno de los motivos preferidos para poner ese toque de frescura y naturalidad a la decoración de cualquier rincón de la casa. Por sí solas fomentan la frescura y naturalidad de cualquier espacio o habitación del hogar, dando un toque tan alegre como fresco a tu decoración de verano. Así que no te olvides de utilizar macetas de forma original con distintos colores y tamaños que llenarán de encanto tu vivienda.
Estampados ligeros
Para llevar a cabo una correcta decoración de verano, es imprescindible dejara de lado los tejidos oscuros que no dejan pasar la luz y ademas atraen el calor. En contraposición, el empleo de estampados de motivos florales a la hora de incorporar textiles, láminas o incluso papel pintado, darán un toque de frescura, desenfado y la alegría en todos y cada uno de los ambientes en que los coloquemos. Decorar con alfombras de verano, hechas con fibras naturales, lino, algodón son una gran elección, además incorporas tejidos frescos y transpirables. No te olvides que en verano los tonos azules y verdes inspiran la playa y el mar. entornos marinos que darán un aire fresco a nuestra decoración. También las composiciones estilo kilim, tribales o marroquíes son otro elemento decorativo para el verano. Tienen un punto exótico que realza cualquier ambiente tanto interior como exterior. Además, gracias a sus formas y figuras, aportan carácter y personalidad.
Conectar con la naturaleza
Para finalizar os queremos hablar del diseño biofílico que está muy en tendencia. Se trata de la búsqueda por conectar con la naturaleza de distintas maneras, mediante materiales naturales, plantas de interior, vistas al mar, a las montañas y a otros paisajes exteriores. A la hora de decorar, el uso de textiles y los papeles pintados con motivos de flores y hojas, apoyan la deseada sensación de cercanía a la naturaleza.